Mi confrontación con la docencia

Soy egresada de la Universidad Autónoma de Baja California de la Facultad de Odontología, mi padre es docente y me insistió en llenar una solicitud para ver si había alguna oportunidad de trabajo en el centro educativo, ya que en mi profesión todavía me faltaba mantenerme en un trabajo estable, así estuve esperando aproximadamente como 3 años hasta que por fin se dió la oportunidad de que me llamaran y hoy en día estoy muy contenta, ya que siempre me llamó la atención la docencia, y creo que mi carrera profesional y experiencia me han sido base para poder enseñar y transmitir el conocimiento.

Por lo general imparto materias del área de la salud, me expreso con mis alumnos como si fuera su amiga, cuidando que sea con respeto, y siento que ellos me tienen confianza, siendo curioso que algunos piensan que estudié psicología, porque aplico mucho mi intuición al analizar sus problemas y darles mi punto de vista, y que en ocasiones coincide con lo que les está pansando; me gusta poder ayudarlos para que ellos puedan desarrollarse mejor en la escuela.

Considero que el ser docente implica una gran responsabilidad ya que tenemos la encomienda de formar jóvenes profesionales, observando que en nuestra preparatoria estos jovenes estudiantes ingresaron como adolescentes. También se nos presenta la oportunidad de intervenir en la vida del joven para poder orientarlo correctamente, ayudándoles a tener un equilibrio físico, mental y social que es lo esencial para lograr el éxito en la vida de cada uno de ellos.

Me satisface apoyar a mis alumnos, la experiencia te la va dando la vida y mis experiencias me han servido para ayudarles a todos ellos. El ser docente y sobre todo a este nivel de preparatoria, me encamina a expresarme y motivar a los alumnos diciéndoles que sí pueden lograr sus objetivos, sólamente hay que intentarlo, es claro que habrá obstáculos en el camino, pero con paciencia y perseverancia lo lograrán.

Dentro de todas las cosas que pasan en esta experiencia como docente, cabe reconocer que tengo algunas insatisfacciones en no poder lograr totalmente la integración de un estudiante que por malas amistades caen en algún tipo de vicio, o que sus problemas familiares lo van alejando del hogar y de la escuela. También creo que soy algo tolerante con los alumnos y siento que es aprovechado por ellos para no cumplir con tareas, trabajos o lo que se les pida. Ante estas situaciones espero mejorar algunas técnicas de evaluación, control y seguimiento en especial a estos casos.

Aunque se nos muestre un entorno difícil y más por la situación mundial, de la crisis, la violencia, la educación será la base para confrontar la vida y para eso estamos aquí.